«El Chontico» cancela asistencia a los debates y extrema sus medidas de seguridad
Ante la presencia de más de medio centenar de pasacalles, en diferentes puntos de Cali, con mensajes en contra de la campaña del candidato Roberto Ortiz, este se pronunció en las últimas horas y pidió juego lilmpio. El candidato Roberto Ortiz, que lidera las encuestas para la Alcaldía Distrital, acusó al candidato Alejandro Eder de ser el gestor de esta campaña de «Todos contra el Chontico» al cual se han unido otros candidatos.
El respecto Roberto Ortiz expidió una carta dirigida a la ciudadanía caleña. Su texto es el siguiente:
Carta del candidato Roberto Ortiz a toda la ciudadanía:
Caleños, ayer nos despertamos con más de 50 pasacalles con el mensaje “Otra Cali NO es posible”, con mi rostro,
un signo igual (=) y la cara de Jorge Iván Ospina, colgados desde la madrugada en los puentes de las principales
avenidas de Cali. Nuevamente, usan en mi contra la misma campaña sucia que en 2019, cuando en aquel
entonces me enfrentaba al hoy alcalde Jorge Iván Ospina y, qué coincidencia, al hoy candidato Alejandro Éder.
Denuncio que la mentira que se está difundiendo, de que yo estoy aliado con Jorge Iván Ospina, cuando
llevo 4 años desde el Concejo denunciándolo por incompetente y por corrupto, la comenzó a promover
hace ya varias semanas el candidato Éder que, incluso, lo hace pautando millonarias sumas de dinero
semanales desde sus propias redes sociales, promoviendo así el odio, la polarización y la violencia política en mi
contra, con graves repercusiones emocionales y de seguridad para toda mi familia.
Su esposa no es la única que sufre, candidato Éder: también la mía, así no lo publique en las redes
sociales, a pesar de estar atravesando por una compleja situación de salud, que como familia nos obliga a
brindarle la mayor tranquilidad posible en su proceso de recuperación. ¡Es una luchadora y la amamos!
A esta infamia promovida por el candidato Éder, luego se unieron los demás: Diana Rojas, Miyerlandi Torres,
Wilson Ruiz y Deninson Mendoza, entre otros, en un reprochable y peligroso llamado al odio (“Todos contra el
Chontico”), orquestando así un ataque sistemático en mi contra, simplemente, por el hecho de ir de primero
en las encuestas, con casi 30 puntos de ventaja, como si en una democracia fuera pecado contar con el apoyo
y el respaldo mayoritarios de la ciudadanía.
Infortunadamente, esta guerra sucia que se está viviendo en la campaña a la Alcaldía de Cali se torna cada
día más peligrosa para mí y para toda mi familia, al punto que he tenido que reforzar mis medidas de
seguridad, dado el llamado constante de mis adversarios al odio colectivo en mi contra, lo que está desatando
hechos de violencia política como los de ayer en la ciudad: no crean que mi agresiva propuesta para recuperar
la seguridad en Cali tiene muy contentos a todos los delincuentes. ¡Me quieren intimidar porque saben que
los voy a perseguir y a capturar a todos!
Además, este ambiente poco garantista para el ejercicio político, tampoco permite el sano debate a partir de las
propuestas que la gente necesita conocer a fondo para decidir su voto por uno u otro candidato.
Por tal razón, anuncio que a partir de hoy cancelo mi participación en todos los debates que, previamente,
ya tenía confirmados para asistir en las próximas semanas y hasta el final de la campaña: agradezco la invitación
y la comprensión de los medios de comunicación locales y nacionales.
También advierto que seguiré firme en mi convicción de no responder a los ataques de mis adversarios: una
cosa es hacer contraste entre mis propuestas de campaña y las de mis rivales, para que la gente las compare, y
otra, bien diferente, es entrar en ataques personales, con injurias e información falsa.
Insisto: por favor, reflexionen. La violencia y la polarización la están promoviendo ustedes mismos cómo
candidatos. Mejor dedíquese más a las propuestas y menos a los ataques. No olviden que para ganar, NO todo
vale, y la integridad física, así como la salud mental de la ciudadanía, de nosotros y de nuestras familias está por
encima de todo.
Para finalizar, invito a los caleños a no dejarse engañar con mentiras ni calumnias, porque —con todas las
medidas de seguridad del caso— voy a seguir recorriendo las calles, visitando los barrios y debatiendo con la
gente, para que el próximo 29 de octubre juntos les demostremos a quienes creen que una persona
humilde, sin apellidos poderosos, surgida de la lucha y no del privilegio, no puede construir un futuro
mejor para nuestra hermosa ciudad, que trabajando unidos ¡OTRA CALI SÍ ES POSIBLE!
Bendiciones para todos.